
Nueva York– El fiscal del distrito neoyorquino de Manhattan, Cyrus Vance, anunció este jueves que dos falsos abogados de inmigración han sido acusados de estafa por aprovecharse de indocumentados en busca de asistencia legal, y urgió a las posibles víctimas a denunciar, ofreciendo para ello intérpretes.
David Moreno, de 41 años, y Víctor Espinal, de 69, fueron acusados hoy en el Tribunal Supremo de los delitos graves de estafa de servicios de asistencia de inmigración en primer grado; de hurto de mayor cuantía en cuarto grado y también de ejercer como abogados sin haber sido admitido y registrado.
Los imputados “se aprovecharon de neoyorquinos indocumentados con la promesa de abrirles camino a un estatus migratorio legal. En su lugar, sus acciones fraudulentas hicieron que una víctima fuese objeto de un proceso de remoción y pusieron a otras en riesgo de deportación”, indicó el fiscal Cyrus Vance.
Asimismo, Vance indicó que “puede haber otras víctimas” y para la investigación, que está en curso, pidió “encarecidamente” a personas “con información pertinente” que llamen a la Unidad de Asuntos de Inmigrantes de la oficina de la fiscalía, un “lugar seguro para denunciar delitos sin importar su estatus migratorio”.
“Estamos aquí para promover su bienestar y proteger sus derechos sin importar su estatus o el idioma que hable”, indica la fiscalía en una nota, en la que ofrece intérpretes para asistir a las personas que no hablen inglés.
Según documentos del tribunal, entre noviembre de 2017 y mayo de este año, Moreno y Espinal se hicieron pasar por abogados de inmigración con un falso bufete de abogados llamado ICONYC Legal Agency, mientras que el segundo también ofreció asesoramiento en el barrio de Washington Heights, al norte de Manhattan.
Moreno se presentaba como director de este bufete que ofrecía “asesoramiento inmigratorio gratuito” por “abogados acreditados” y se reunía con sus víctimas en unas oficinas situadas en el centro de Manhattan para convencerlas de que lo contrataran para llevar su solicitud de asilo.
Las víctimas pagaron a Moreno unos presuntos “honorarios legales” de entre $500 y $560 y este completó de forma fraudulenta las solicitudes de asilo con errores, inexactitudes e insuficiente información, explican las autoridades.
Las autoridades destaparon su trama a partir del pasado enero, cuando un investigador de la fiscalía se hizo pasar por inmigrante indocumentado interesado en legalizar su estatus y llamó al número publicado por ICONYC Legal Agency.
Durante tres meses, Moreno y Espinal intentaron convencer al investigador encubierto de que podían entregar una solicitud de residencia permanente basada en los 10 años que el detective llevaba en Estados Unidos, y en dos reuniones posteriores Moreno le cobró $2,300 en honorarios.
Espinal ya fue procesado por la fiscalía de Manhattan por ejercer como abogado sin licencia entre 1997 y 2008, y en 2010 se declaró culpable de ello y otras acusaciones, entre ellas fraude, por lo que fue sentenciado a 6 meses de prisión.