Washington – La Casa Blanca afirmó hoy que el gobernador Ricardo Rosselló Nevares tomó la decisión correcta al dimitir a la gobernación de Puerto Rico, tras los escándalos recientes de su administración y sobre su propio carácter.
“Durante meses, el presidente Trump ha expresado su profunda preocupación de que el terrible liderazgo en la isla, la corrupción desenfrenada y la mala administración de los recursos del gobierno federal por parte de los políticos locales hayan causado el sufrimiento continuo de la gente de Puerto Rico”, indicó Judd Deere, portavoz de la Casa Blanca.
Deere dijo que la aministración Trump “sigue comprometida con el esfuerzo de recuperación en Puerto Rico y somos optimistas de que bajo un nuevo liderazgo, Puerto Rico pueda comenzar un nuevo capítulo libre de politización y abusos financieros”.
Frente a las denuncias a que se ha enfrentado Trump por la lenta e ineficiente respuesta federal al huracán María, que causó la muerte de alrededor de 2,975 personas, el presidente de EE.UU. ha cuestionado la capacidad e integridad de los funcionarios gubernamentales de la Isla.
Asediado por los casos de corrupción recientes en su gobierno y el escándalo que desató la revelación de un chat en el que junto a sus asesores más cercanos se burló e insultó a amplios sectores de la sociedad puertorriqueña, Rosselló Nevares oficializó ayer su renuncia, en una carta a los presidentes de las cámaras legislativas, Thomas Rivera Schatz, y Carlos “Johnny” Méndez, y a la jueza presidenta del Tribunal Supremo de Puerto Rico, Maite Oronoz Rodríguez