SOJA. Para el trimestre abril – junio de 2019, el volumen comprometido de la oleaginosa es de 8 millones de toneladas.
En conjunto, las ventas de exportación derivadas de la cosecha gruesa para el trimestre abril-junio de 2019 acumulan cerca de 20 Mt, triplicando las del mismo período del año pasado, cuando contabilizaron 6,6 Mt. “El programa de embarques de maíz argentino para lo que resta de mayo y junio continúa siendo muy abultado, sostenido por la disponibilidad de oferta gracias al frenético ritmo de avance de las labores y por la competitividad que ha mostrado el cereal argentino en la plaza externa”, señala un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
El avance de la cosecha supera al registrado los últimos años para la época, debido a la mayor participación del maíz temprano en los planteos. A esta altura ya se ha recolectado el 46% del área sembrada, cuando el promedio en otros años es del 33%. Además, el área a cosechar aumentó un 30% con respecto al promedio del último lustro.
De acuerdo con el registro de la Secretaría de Agroindustria a la fecha, las exportaciones comprometidas de maíz hasta junio alcanzan las 12 millones de toneladas en el trimestre abril-junio de 2019 contra menos de 3 millones en el mismo período de 2018, un año signado por la sequía. Esto implica un crecimiento del 315%. “Este número, además, podría seguir creciendo en caso que se sumen nuevas ventas de exportación en el próximo mes y medio”, sostienen desde la la BCR.
En el caso del complejo soja, el tonelaje comprometido a la fecha duplica al total del año pasado: cerca de 8 millones de toneladas en abril-junio 2019 contra menos de 4 millones el año anterior, un aumento del 111%. “En relación con los precios, la soja y el maíz mostraron un importante avance en los precios. El precio de pizarra de la soja publicado por la Cámara Arbitral de Cereales de la BCR correspondiente al jueves 16 de mayo quedó en $ 9.950/t, avanzando 520 pesos desde el jueves anterior, un aumento del 5,2%. En dólares, la suba fue superior debido a la caída semanal en el tipo de cambio, el precio pasó de US$ 210/t a US$ 223,1/t, un 6,3% superior. Para el maíz, el aumento fue de 4,4% en pesos y de 5,2% en dólares, con precios que quedaron en $ 6.250/t y US$ 140,2/t, respectivamente”.
Por su parte, las provisiones locales de maíz demostraron un buen nivel de competitividad hasta mediados de este mes, cuando comenzaron a apreciarse en relación a la oferta brasileña a medida que comienza a salir la “safrinha”, que sumaría cerca de 70 millones de toneladas a la oferta mundial.
El informe de la BCR establece que “los precios de exportación
estadounidenses de maíz, por su parte, se encuentran muy por encima de los sudamericanos, explicando el retraso de sus exportaciones (existe preferencia a comprarle a Brasil y Argentina por contar con precios más bajos). Para el caso de la soja, en cambio, las tensiones comerciales con China de las últimas semanas han incrementado el diferencial de precios entre los suministros brasileños y estadounidenses. El contexto actual comienza a asemejarse a la situación del segundo semestre del año pasado cuando en medio de un agudo conflicto entre ambas potencias mundiales la brecha entre EE.UU. y Sudamérica se amplió a niveles anormalmente altos.”
Nuevo híbrido de girasol resistente. Técnicos del INTA desarrollaron un híbrido con resistencia a herbicidas del grupo de las imidazolinonas (IMI) y buenas aptitudes agronómicas en sanidad, tenor de aceite y rendimientos. Recomendado para la mayoría de las zonas productivas del país, este nuevo cultivar es comercializado por la empresa Los Algarrobos y estará disponible para la campaña que comienza en pocos meses.
“FEBO 817 CL INTA, como se denominó el híbrido de girasol obtenido, permite el uso de herbicida IMI que, aplicado luego del período de emergencia, posee una residualidad en el suelo y ejerce un muy buen control de un amplio espectro de malezas hasta el final del ciclo”, detalló Daniel Alvarez, responsable del Programa de Mejoramiento Genético de Girasol del INTA Manfredi (Córdoba).
Estas características resaltan el potencial del cultivar y lo hacen una alternativa destacada en relación con otras variedades ofrecidas en el mercado. En cuanto a rendimientos, ensayos a campo demostraron que la capacidad productiva de este híbrido alcanzó valores de hasta un 10% por encima del promedio de cultivares similares. De acuerdo con la descripción técnica, se trata de un híbrido simple oleaginoso, de pericarpio negro con estrías grises y ciclo intermedio a floración y a cosecha. Desde el punto de vista agronómico, presenta características positivas como buen comportamiento sanitario, gran estabilidad, alto rendimiento y buen contenido de aceite en grano.
El nuevo híbrido fue evaluado en la red de ensayos dirigida por el INTA en las principales zonas de cultivo del país. “En principio, está recomendado para la zona girasolera central, pero su buen comportamiento en diferentes áreas lo harían apto para una difusión en gran parte de la zona girasolera del país”, indicó Alvarez.