El canciller colombiano Carlos Holmes denunció el viernes ante el Consejo de Seguridad de la ONU que se desconoce el paradero de varios comandantes de las desaparecidas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y criticó al exlíder de esa guerrilla, Jesús Santrich.
Holmes dijo durante una reunión sobre el proceso de paz en su país que varios líderes de la antigua guerrilla están incumpliendo sus compromisos, por lo que deben abrirse «incidentes de verificación de incumplimiento».
A pesar de que el gobierno colombiano seguirá trabajando para reincorporar a más de 10.500 excombatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia FARC a la sociedad, dijo Holmes, el 16% de sus líderes “de esa antigua guerrilla no ha aportado verdad, no ha asistido a las audiencias y no se ha comprometido con las garantías de no repetición al desconocerse su paradero en la actualidad” indicó.
El canciller fue especialmente duro con Santrich, actual congresista y excomandante de las FARC, quien no se presentó la semana pasada ante la Corte Suprema para una indagatoria por narcotráfico. Se ha ordenado su captura con circular roja de Interpol.
«Deploramos que una persona, que ejerce una posición de liderazgo dentro de su organización, a tal punto que el pasado 11 de junio se posesionó como congresista, evada la justicia, eluda sus obligaciones con las víctimas y se aproveche de la buena fe de todos los colombianos», dijo Holmes.
Holmes Trujillo además señaló que esta acción solo puede entenderse como una evasión a la justicia, “ya que el pasado 9 de julio debía rendir indagatoria ante la Corte Suprema de Justicia, por su presunta implicación en delitos de narcotráfico después de la firma del Acuerdo Final. Ello por no hablar del incumplimiento de sus obligaciones ante la Jurisdicción Especial para la Paz”.
Además de Santrich, Holmes denunció el viernes la conducta de Luciano Marín Arango, más conocido como Iván Márquez; Hernán Velásquez Saldarriaga, conocido como «El Paisa», y Henry Castellanos Garzón, más conocido como «Romaña», quienes, dijo, merecen la condena del partido político formado por los exguerrilleros en señal de «compromiso con el cumplimiento de sus obligaciones».
En 2016, el gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos y las FARC firmaron un acuerdo de paz que puso fin a 50 años de conflicto armado interno. Como parte del pacto, la exguerrilla -devenida ahora en el partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común- también obtuvo diez curules: cinco en el Senado y cinco en la Cámara de Representantes.
Después, el Consejo de Seguridad estableció en Colombia una misión política que se enfocó inicialmente en verificar el desarme de los rebeldes y que ahora está centrada en la reinserción de los exguerrilleros a la sociedad.
Durante el encuentro, el canciller Holmes Trujillo agradeció a los miembros del Consejo de Seguridad por su visita a Colombia, efectuada la semana pasada por invitación del Gobierno.
“Saludamos que el Secretario General en su Informe reconozca el compromiso del Gobierno Nacional con la implementación del Acuerdo Final, a través de acciones y la adopción de medidas concretas, algunas de las cuales van más allá de sus obligaciones iniciales en estricto sentido”, indicó el canciller.
“El Gobierno ha cumplido y seguirá cumpliendo, con total determinación, con sus compromisos para asegurar la reincorporación exitosa de los más de 10.500 excombatientes que siguen participando en este proceso y que se mantienen genuinamente en el camino de la legalidad”, añadió.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo este mes que lamenta la «polarización y la división» en Colombia en torno a elementos del acuerdo de paz y pidió al gobierno garantizar que cualquier cambio al pacto respete los compromisos hechos a los rebeldes que depusieron las armas.
Por su parte Carlos Ruiz, jefe de la misión de la ONU en Colombia, denunció en la reunión que la inseguridad es «extremadamente preocupante» en algunas áreas del país. Agregó que 127 exguerrilleros han sido asesinados desde la firma de la paz, entre ellos un comandante que participó en las negociaciones y que dirigía una iniciativa productiva.
Aun así, Ruiz destacó que la gran mayoría de los exmiembros de las FARC, así como los líderes de su partido político, apoyan el proceso de paz y pidió al gobierno colombiano que aumente el número de proyectos que generen ingresos para los excombatientes y les ofrezcan apoyo técnico y financiación.
Ruiz también denunció los homicidios de activistas sociales.
Sobre el compromiso de Colombia para acabar con los cultivos ilícitos, el canciller colombiano aseguró que la “acción del Gobierno del presidente Duque se dirige a disponer del mayor número de herramientas posibles: erradicación forzosa, erradicación voluntaria, acuerdo con las comunidades, fumigación a bajas alturas, fumigación con todas las seguridades».
El presidente colombiano, Iván Duque ha pedido al Consejo de Seguridad que extienda por un año el mandato de la misión de verificación. Los miembros del Consejo de Seguridad que hablaron el viernes expresaron su compromiso de seguir luchando por la paz en Colombia.
Con información de AP.