La Comisión Interamericana de Derechos Humanos dio a conocer detalles sobre su informe del asesinato de un equipo del diario El Comercio en marzo de 2018 en el que señala recomendaciones para los gobiernos de Ecuador y Colombia.
Los trabajadores de El Comercio Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra viajaron desde Quito a la provincia de Esmeraldas, para hacer una investigación sobre los atentados ocurridos en la frontera norte de Ecuador por grupos criminales.
En la mañana del 26 de marzo de 2018, tras llegar a Mataje, fueron secuestrados por un grupo criminal colombiano que operaba en ambos países.
En junio, sus cadáveres fueron encontrados en una fosa común.
El informe habla de una descoordinación del ejército y la policía de Ecuador pues se les permitió pasar a los periodistas hasta la zona de Mataje donde fueron capturados por las disidencias de las FARC, pero no les dieron protección pues cada entidad pensó que era competencia de la otra y hubo omisiones en el procedimiento.
Edison Lanza, relator de las CIDH, señala que “la inteligencia de Ecuador tenía muchos más elementos para saber que había una situación de riesgo extremo”.
Por otra parte, Ricardo Rivas, hermano del fotógrafo Paul, menciona que aún falta mucha información y que debe desclasificar como lo recomienda la CIDH.
“Aquí hay omisiones que se dieron, quiénes autorizaron el ingreso de una fuerza extranjera a nuestro país para que opere hacia Colombia”, dijo Rivas.
El Estado ha sido llamado a reconocer una indemnización a las familias. Ellos piensan que este informe es el primer paso para continuar con esta investigación y quieren que se haga justicia y conocer toda la verdad de lo que realmente ocurrió.
Los periodistas estaban cubriendo el tema de la violencia en la zona y resultaron víctimas de la misma.