A menos de una semana del fallecimiento de Alexei Navalny, líder de la oposición al gobierno de Vladimir Putin en Rusia, la Cancillería argentina difundió este martes una declaración para fijar la posición del Gobierno con respecto al caso que adquirió magnitud tanto para la prensa internacional como para organismos de derechos humanos. En este contexto, la cartera que dirige Diana Mondino instó a las autoridades rusas a que investiguen y esclarezcan de inmediato el deceso del dirigente «promotor de la democracia y los derechos humanos».
La muerte reciente de Navalny, uno de los líderes políticos más temidos por el Kremlin, originó un nuevo elemento de tensión en el ya intranquilo vínculo diplomático entre las autoridades argentinas y rusas.
A través de un comunicado, la Cancillería dio a conocer la posición crítica del Gobierno, que exigió a las autoridades de la Federación de Rusia comprometerse en la investigación del caso.
«Respecto al esclarecimiento de la muerte de Alexei Navalny, líder político de la oposición rusa y promotor de la democracia y los derechos humanos, el Gobierno argentino formula un llamado a las autoridades de la Federación de Rusia a que realice una investigación que arroje, a la mayor brevedad, luz sobre lo acontecido«, remarcaron a través de un comunicado de prensa.
«No reconozcan estas elecciones»: el pedido de la esposa de Navalny a la Unión Europea
El paralelo, se conoció el reclamo de Yulia Naválnaya, viuda del líder opositor ruso Alexéi Navalny, quien formuló un pedido a la Unión Europea (UE) para que no reconozca las elecciones rusas de marzo, que casi con seguridad otorgarán al presidente Vladimir Putin otro mandato de seis años.
«No reconozcan estas elecciones», dijo Naválnaya a los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea en una reunión celebrada el lunes en Bruselas, según una transcripción facilitada el martes por una portavoz.
«Un presidente que asesinó a su principal oponente político no puede ser legítimo por definición», enfatizó la autora de la denuncia contra el jefe del Kremlin.
Naválnaya acusó a Putin de matar a su marido y agregó que en breve se aportarán pruebas.
Los líderes occidentales, incluido el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, responsabilizaron a Putin por la sospechosa muerte y advirtieron de las consecuencias, pero por el momento no aportaron pruebas al respecto.
Mientras tanto, Putin no hizo ninguna declaración pública sobre la muerte de Navalny.
El Kremlin sí se pronunció y negó su implicación y expresó que las afirmaciones occidentales de que Putin era responsable son completamente «inaceptables».
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